Si pudiera resumirte en palabras la experiencia de la regresión de hoy, las palabras sería…
serían…
Serían…
¡No! No hay forma en que pueda resumirte la experiencia de hoy.
Eso sí, GRACIAS INFINITAS o GRACIAS TOTALES.
Tal vez esa sea la frase que usamos cuando no alcanzan las palabras para explicar.
Aunque también me gusta lo que dice Cloud Atlas…
Nuestra vida no nos pertenece. Del vientre a la tumba, estamos unidos a otros, pasado y presente. Y con cada crimen que cometemos, cada gesto amable, alumbramos nuestro futuro.
Hoy vino a la consulta un humano etiquetado con estos títulos:
Ladrón (aunque en esa época no usaba armas), estafador (bueno, solamente hizo un pasaporte argentino falso estando en Italia para conseguir la residencia… y fue hace muchoooooooo tiempo), traficante: venta de armas de grueso calibre, adicto (cocaína porque la marihuana es para hippies), dealer de droga… y vaya uno a saber cuantas otras etiquetas que ahora no me vienen a la mente.
¿Asesino?
¡No! En la vida hay límites que no se pasan… me dijo…
A los 19 años tuvo un accidente con la moto en la cual oyó una voz que le dijo: parate en los pedales… Chocó de frente contra un auto a 140 km por hora. Se dislocó el femur, un raspón en la rodilla y un golpecito en el brazo. Nada.
¿Por qué o para qué lo salvaron? Me estuve preguntando todo el tiempo de la sesión.
Algunas veces la vida nos presenta opciones para elegir: el camino fácil o el camino difícil. Hay que tener coraje para elegir el camino difícil. Sin embargo, los beneficios del camino difícil son mas que proporcionales a los resultados del camino fácil. Eso sí… solo si logras ATRAVESAR el camino.
A las personas con esta vida se las ve duras, fuertes, comlejas, por afuera.
Sin embargo esa dureza es solo una máscara que esconde la vulnerabilidad que sienten en su interior a la hostilidad de la mátrix.
Es uno de los mecanismos de defensa del ego.
Hacerse el fuerte para tapar el agujero interior.
Como te darás cuenta… no sólo no tapan el agujero sino que se hace cada vez mas profundo.
Pero ya no pueden salir.
Hay que tocar fondo.
Veo muchos jóvenes con estas características. Y muchos padres desesperados que no saben como administrar la situación.
Nada es lo que parece.
Son personas con una fortaleza espiritual DEMOLEDORA pero que no sirve para nada cuando se entra en el proceso de socialización. Y como el agujero tira, arman la máscara. Y la máscara se vuelve parte de su piel. No se dan cuenta que no es real. Hasta que la atraviesan.
Atravesarla no es una tarea sencilla.
Y muchas veces sólo la atravesas cuando llegás al límite de la vida y la muerte.
Ahí tuvo que llegar este ser.
Llegó al borde del abismo y llamó a un amigo: venime a buscar y llevame donde sea…
Donde sea, por suerte, fue una institución de rehabilitación.
Fundación Identidad, basada en el programa Minnesota.
No la conocía… pero me animo a recomendarla.
Le devolvió la identidad de Ser un Ser Humano.
Todos tenemos uno que otro muerto en el placard. El que esté libre de pecado, que tire la primera piedra…
Yo… soy incapaz de hacer juicios sobre las historias de vida… ¿te cuento la mía? Nooooo…
Con el tiempo entendí que elegimos lo que elegimos \\\»in order to feel humans\\\» para poder sentirnos humanos. Y que son esas elecciones las que nos convierten en quienes somos. A mayor miseria, mayor potencial para ayudar a los miserables… Aunque… definamos miseria…
Este es un mundo en el cual se cree que la miseria es la falta de dinero…
Miseria es la falta de AMOR INCONDICIONAL no importa cuantos millones se tengan en el banco.
He visto en este trabajo que los débiles en la matrix son los fuertes en el mundo REAL.
Y que, como nada es lo que parece, muchas veces confundimos lo que vemos.
Llegó a la consulta luego de un programa de 75 días que lo hizo DESPERTAR.
Vino con los ojos opacos… sin brillo…
Lo llevaron a una zona intermedia para REPARAR su sistema energético… en un Cielo intermedio.
Se veía a sí mismo como flotando en un Cielo.
Lo veía rodeado de seres gigantescos, superluminosos, re-estructurando su energía.
Muerte y renacimiento.
Fuerza… una fuerza que no es de este mundo.
Un potencia que no había sentido nunca antes en nadie.
Hay que poder caminar por el Infierno y volver para contarlo…
Lo mandaron a traer amor.
Pero no cualquier amor… Solo AMOR INCONDICIONAL.
Y como no lo conocía… lo tuvo que aprender… por el camino difícil…
Tikun en Aries. El guerrero pacífico. Saliendo de libra… saliendo de la ley, fuera de la ley, sin diplomacia. Sin puntos medios. A matar o morir. A renacer…
La pregunta que me viene a la mente es: ¿todos tenemos que pasar por esto en la vida para poder traer amor incondicional?
¡No! A cada cual según el poder de la vasija que porta.
Y ese poder no es algo que podamos ver en este mundo irreal donde nada es lo que parece.
Pero si lo podemos sentir… y muchas veces nos asusta. No asusta tanto que elegimos con miedo.
Pero \\\»ELLOS\\\» nos cuidan, están siempre con nosotros, nos encaminan, nos hacen llegar las personas que necesitamos, y nos devuelven a la misión.
El trabajo, tenemos que hacerlo nosotros.
En ese lugar intermedio pasará un tiempo.
Les respondieron todas las preguntas que hizo.
Hasta donde las podía escuchar.
A él le dijeron una cosa. A mí me dijeron otra… Por lo pronto… no vamos a perderlo de vista…
Hay muchooooooooooooo material para re-editar.
El brillo de sus ojos cuando salió es la recompensa que el Universo me dejó.
GRACIAS TOTALES.
El programa de 12 pasos de la Fundación Identidad.
Admitimos que éramos impotentes ante nuestra adicción, que nuestra vida se había vuelto ingobernable.
Llegamos a creer que un Poder Superior podría devolvernos el sano juicio.
Decidimos poner nuestra voluntad y nuestra vida al cuidado de Dios, tal como nosotros lo concebimos.
Sin miedo hicimos un minucioso inventario moral de nosotros mismos.
Admitimos ante Dios, ante nosotros mismos y ante otro ser humano la naturaleza exacta de nuestras faltas.
Estuvimos enteramente dispuestos a dejar que Dios eliminase todos estos defectos de carácter.
Humildemente le pedimos que nos quitase nuestros defectos.
Hicimos una lista de todas aquellas personas a quienes habíamos hecho daño y estuvimos dispuestos a enmendar el daño causado.
Reparamos directamente el daño causado, siempre que nos fué posible, excepto cuando el hacerlo perjudicaría a ellos o a otros.
Continuamos haciendo nuestro inventario personal y cuando nos equivocábamos lo admitíamos inmediatamente.
Buscamos a través de la oración y la meditación mejorar nuestro contacto consciente con Dios, como nosotros lo concebimos, pidiéndole solamente conocer Su Voluntad para con nosotros y la fortaleza para cumplirla.
Habiendo obtenido un despertar espiritual como resultado de estos pasos, tratamos de llevar este mensaje a los adictos y de practicar estos principios en todos los aspectos de nuestra vida.