¿Jura decir la Verdad?

¿Jura decir la verdad, toda la verdad y nada mas que la verdad?
¡Si! Lo juro.

Cuantas películas de Hollywood comienzan así para luego demostrarnos como era solo una mentirita y un artilugio del abogado para mover la trama del juicio hacia determinado lugar ¿no?

En Argentina tenemos un juego de naipes llamado \\\»Truco\\\». Se juega de a dos y en grupo. La base de ese juego es, básicamente, mentir. Cuanto mejor mentis, mas puntos conseguís. Incluso existen señas con la cara para mostrar que naipes \\\»de verdad\\\» te tocaron en suerte y así mostrarle a tu compañero de juego la verdad de tus cartas sin que los otros se den cuenta.
Otro artilugio para mover el juego hacia determinado lugar.

¿Vale?
¡Si! ¡Vale!
No solo vale sino que casi todo el juego está estructurado en función del poder de tu mentira.
Lo mismo sucede en el Poker.
Y vamos… todos lo saben…
Y nadie se enoja por eso.
Y todos siguen con el juego a pesar de la mentira.

Verdad… mentira… solo son puntos de vista.
Todo puede cambiar en un instante, como ocurre en los juegos de naipes. Ahora tienes unas cartas y en la siguiente jugada tienes otras.

Lo mismo sucede con los matrimonios. Lo lamento pero tengo que decirlo. Es otro juego de los que participamos en esta aventura que llamamos vivir.

¿Jura… bla bla bla hasta que la muerte los separe?
¡Si! ¡Juro!

Pero juramos sabiendo que existe la ley de divorcio.
Y luego el 50% o mas usará esa ley.
Y la anulación papal de los matrimonios.

Hecha la ley… hecha la trampa.

Y en la política…
¿Jura defender con lealtad y patriotismo bla bla bla?
¡Si! ¡Juro!
Si así no lo hiciere que Dios y la Patria me lo demanden.

El juramento hipocrático de los médicos, la jura de la bandera, y vaya uno saber cuántas otras cosas mas juramos.
Con los dedos cruzados, eso sí.
Porque en el fondo todos sabemos que es solo un juego.

Y la verdad es que todos nosotros sobrevivimos a esas mentiritas porque sabemos que estan puestas ahí para producir algún efecto.
Como decía Al Pacino e la película el Abogado del Diablo.
Él es el dueño de los efectos especiales…

Y lo es… Satán, el contrincante.

¿Entendimos el punto?

Ahora voy a explicar por qué estoy haciendo esta introducción.

Nunca nada es lo que parece en esta realidad. Y ese es el sustento de la misma.
Nada es lo que parece, así que no te aferres a nada porque todo puede ser una ilusión… o una mentira.
Necesaria, cierto, para inducirte a actuar de alguna manera.
Como dice también Al Pacino, respeto el libre albredrío de los humanos…

Y vaya si lo hace.

La mentira es también parte del juego.

Te voy a contar el dato mas significativo que a mí me sirvió para probar esta teoría.

Cuando hice mi regresión con Dolores yo creía 100% sobre el proceso y no sabía que podían usar artilugios para hacernos actuar de determinada manera. Estaba en mi etapa LITERAL: todo es verdad así como sucede. Como los niños.
Bueno, era un poco inocente y sin experiencia práctica en estos temas. Mucha teoría, sí. Pero entre la teoría y la práctica hay un abismo.

En mi regresión dije cómo y en qué mes iba a conocer al hombre con el cual iba a construir mi misión.
Toda la historia de mi vida había sido preparada para ese encuentro.
Nunca le dije a nadie eso que había visto.
Pero un día llegó esa fecha, ese mes. Y conocí a alguien. Y creí que ese alguien era aquel alguien porque muchos indicios coincidían.
Y ahí lo comenté como mis compañeros.
Por primera vez.
Y preguntamos en conexión. Estábamos los tres. Y dijeron sí. Es él. Uno de nosotros lo dijo (no era yo) y los tres lo escuchamos.
A partir de esa respuesta todo se empezó a mover a pasos agigantados.
Y era respuesta movió al que sí de verdad era a que tome las decisiones que no había podido tomar.
Y las decisiones de ese me movieron a mi para que me haga cargo de lo que me pasaba y no había podido dejar salir.
Y se armó un kilombo de película de Hollywood.
En función de una mentira que fue dicha desde arriba para mover a que una verdad se manifieste.

Como en el POKER, como en el TRUCO… Y como en cuanto juego de desafíos que se preste.
Ahí perdí la inocencia.
¡Mintieron!
¡Si! ¡Vale mentir! Vale mentir si en función de esa mentira hacen que las fichas del juego se muevan para donde no se pueden mover en el statuo quo de las cosas.
Ese momento fue para mi MI GRAN DESILUSIÓN. Y como toda des-ilusión fue mágico porque me ayudo a entender cómo funciona el juego y quien pone las reglas.
No las ponemos nosotros.
En este nivel tridimensional somos algo asi como títeres de nuestro nivel superior.
No nos damos cuenta de nada y actuamos por \\\»sospecha\\\» de situaciones.
Nuestro SER conoce todo el panorama y usa cualquier estrategia que esté a su alcance para hacernos mover hacia donde tenemos que ir.
Si fuéramos mas despiertos no necesitaríamos que nos muevan como a niños.
Pero se ve que no lo somos.

Bienvenidos al juego, la aventura ha comenzado.

Y si esto puede hacer la Luz… imaginate los disfraces y mentiras que puede decir la oscuridad, que no tiene filtro ni misericordia.
Cuantos hay por ahí que dicen canalizar o soñar, o ver, o hablar o lo que sea… con seres de luz…
Nada es nunca lo que parece.
Por eso el DISCERNIMIENTO es mi herramienta permanente y la PRUDENCIA mi ley.

2 comentarios en “¿Jura decir la Verdad?”

  1. Carlos Alberto Sierra Morales

    Que fuerte, hay que saberse cuidar o confiar en que estas cuidado y dejar fluir, el discernimiento es complicado, creo que está mas en escuchar tu corazón pero eso es algo que por todas las capas de cosas con las que lo recubrimos también puede engañarnos, te quedas en la superficie, cuando tenia unos 15 o 16 tenia una máxima: La verdad es solo la mentira más convincente en un contexto determinado, solo me puedo dejar llevar por el amo y confiar en que nada malo me pase, igual todo lo que me puede pasar es que tenga que volver en otro cuerpo a vivir esta experiencia.

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